Los terrarios son pequeños ecosistemas encerrados en recipientes de vidrio que combinan naturaleza y decoración de forma armoniosa. Son ideales para quienes desean tener plantas en casa pero no disponen de mucho espacio o tempo. Además de ser estéticamente atractivos, los terrarios requieren poco mantenimiento y pueden adaptarse a distintos estilos de interior.
En este artículo te enseñamos paso a paso cómo montar un terrario decorativo con plantas, qué materiales necesitas, qué especies son más adecuadas, cómo cuidarlo y dónde colocarlo para que luzca hermoso y saludable.
¿Qué es un terrario?
Un terrario es un recipiente, normalmente de vidrio transparente, que contiene plantas y otros elementos naturales, creando un microambiente controlado. Puede estar abierto (sin tapa) o cerrado, lo que influye en el tipo de plantas que se pueden usar y en su mantenimiento.
Los terrarios cerrados retienen más humedad y simulan un clima tropical. Los abiertos son mejores para especies que requieren buena ventilación, como suculentas y cactus.
Este tipo de jardín en miniatura se ha vuelto popular por su bajo mantenimiento, su valor decorativo y su capacidad para conectar con la naturaleza en espacios pequeños.
Beneficios de tener un terrario
- Requiere poco riego y cuidado
- Es decorativo y personalizable
- Ocupa poco espacio, ideal para escritorios y estanterías
- Se puede hacer con materiales reciclados
- Ayuda a relajar y reduce el estrés visual
- Enseña sobre ecología y ciclos naturales
Tener un terrario en casa o en la oficina es una forma práctica de introducir verde en tu vida diaria, incluso si no tienes experiencia con plantas.
¿Qué materiales necesitas?
Antes de empezar, asegúrate de tener los siguientes elementos:
- Un recipiente de vidrio transparente (frasco, pecera, vaso grande, jarrón, bombonera, botella, etc.)
- Piedras pequeñas o grava (para el drenaje)
- Carbón activado (opcional, para evitar olores y hongos)
- Sustrato o tierra para plantas (dependiendo del tipo)
- Plantas adecuadas para terrarios
- Herramientas pequeñas o pinzas (para manipular dentro del recipiente)
- Elementos decorativos: musgo, arena, piedras decorativas, mini figuras, corteza, etc.
Puedes usar materiales reciclados que tengas en casa o adquirir kits específicos de terrarios.
¿Qué plantas elegir?
La elección de plantas dependerá del tipo de terrario: abierto o cerrado.
Para terrarios abiertos:
- Suculentas (Echeveria, Crassula, Sedum)
- Cactus pequeños
- Haworthia
- Kalanchoe mini
- Planta rosario (Ceropegia woodii)
Estas especies requieren buena luz y no toleran alta humedad.
Para terrarios cerrados:
- Fitonias
- Helechos pequeños
- Musgo
- Marantas
- Peperomias
- Pilea
Estas plantas disfrutan la humedad y se desarrollan bien en ambientes húmedos y cálidos.
Evita combinar plantas con necesidades muy distintas en el mismo recipiente.
Paso a paso: cómo montar tu terrario
1. Limpia el recipiente
Asegúrate de que esté limpio y seco para evitar moho o bacterias. El vidrio debe ser transparente para permitir el paso de luz.
2. Crea la base de drenaje
Coloca una capa de piedras pequeñas o grava de unos 2 a 4 cm de altura. Esto evita que el agua se acumule en el fondo y pudra las raíces.
3. Agrega carbón activado
Si tienes acceso, añade una fina capa de carbón activado sobre las piedras. Este paso es especialmente útil en terrarios cerrados, ya que previene malos olores y mantiene el ambiente limpio.
4. Añade el sustrato
Coloca tierra adecuada según el tipo de planta. Para suculentas y cactus, usa sustrato arenoso. Para plantas tropicales, mezcla tierra con turba y perlita.
La capa debe ser lo suficientemente profunda para que las raíces puedan fijarse (al menos 5 a 7 cm).
5. Planta con cuidado
Haz pequeños agujeros en el sustrato y coloca cada planta con cuidado usando pinzas o una cuchara. Acomoda las raíces suavemente y presiona ligeramente la tierra para fijarlas.
Deja espacio entre las plantas para que puedan crecer sin competir.
6. Decora y personaliza
Agrega musgo, piedras decorativas, figuras pequeñas, trozos de madera o arena de colores para darle un toque personal. Esto no solo embellece el terrario, sino que también ayuda a mantener la humedad y temperatura estable.
7. Riega ligeramente
Después de plantar, rocía un poco de agua sobre el sustrato (no sobre las hojas). No satures. Si es un terrario cerrado, bastará con una pequeña cantidad de agua, ya que la humedad se conservará.
Si es abierto, deberás regar con más frecuencia, pero siempre con moderación.
Cuidados básicos del terrario
Aunque requieren poco mantenimiento, es importante seguir ciertos cuidados para mantener el terrario sano:
Luz: colócalo en un lugar con luz natural indirecta. No lo expongas al sol directo, ya que el efecto lupa del vidrio puede quemar las plantas.
Riego: riega solo cuando el sustrato esté seco. En terrarios cerrados, bastará con rociar una vez cada 2 a 4 semanas. En terrarios abiertos, riega cada 7 a 10 días según el clima y tipo de planta.
Ventilación: abre ocasionalmente los terrarios cerrados para renovar el aire (una vez por semana es suficiente).
Poda y limpieza: retira hojas secas o enfermas. Recorta plantas que crezcan demasiado para mantener la proporción y estética.
Control de humedad: si se forma mucho vapor en las paredes del terrario cerrado, destápalo unas horas para equilibrar. Si está muy seco, rocía un poco de agua.
Evita fertilizantes fuertes: las plantas de terrario no necesitan mucha fertilización. Si lo haces, usa productos muy diluidos y solo en primavera.
Ideas para ubicar tu terrario
- En una mesa de centro o repisa
- En escritorios o estanterías altas
- En el baño con buena luz (ideal para plantas tropicales)
- Como centro de mesa en el comedor
- En la cocina junto a otras plantas aromáticas
- En oficinas o espacios de trabajo como punto de conexión natural
Elige un lugar donde puedas disfrutar visualmente del terrario y donde reciba buena iluminación sin cambios bruscos de temperatura.
¿Cuánto dura un terrario?
Un terrario bien hecho y con plantas adecuadas puede durar varios años. Solo necesitará podas periódicas, reposición de agua y limpieza ocasional. Con el tiempo, puedes cambiar alguna planta o renovar el diseño si lo deseas.
El secreto está en mantener el equilibrio de humedad, luz y espacio para que el ecosistema funcione por sí solo con mínimas intervenciones.
Conclusión
Montar un terrario decorativo con plantas es una actividad creativa, relajante y muy gratificante. No solo embellece tus espacios, sino que también te conecta con el mundo vegetal desde un enfoque práctico y sostenible. Con pocos materiales, algo de paciencia y creatividad, puedes crear tu propio pequeño jardín encerrado en vidrio y disfrutar de la naturaleza todos los días.
Además de ser una excelente opción para regalar o decorar, los terrarios son una forma de aprender sobre ecología, respeto por el ciclo de la vida y cuidado del medio ambiente en escala miniatura.
¿Listo para crear el tuyo?